Chiquimula, junio 2025. Después de más de 20 años de espera, las familias de la aldea Maraxcó, ubicada en el corredor seco del departamento de Chiquimula, están dando un paso histórico hacia una vida más digna y con bienestar comunitario. Gracias a la intervención del Ministerio de Desarrollo Social (Mides), a través del Fondo de Desarrollo Social (Fodes), fue entregada una dotación de 1,285 tubos para la instalación de su primer sistema de drenajes y la introducción de agua potable, junto con 10 tinacos para almacenamiento.
Este aporte responde a una gestión realizada por el Consejo Comunitario de Desarrollo (COCODE) de Maraxcó a través de la Ventanilla Única del Fodes, mecanismo que permite atender necesidades concretas desde el territorio, con participación ciudadana y enfoque de justicia y equidad social.
«Este es un ejemplo de cómo el trabajo en conjunto se transforma en resultados reales», destacó Luis Compá, Gobernador Departamental de Chiquimula, durante la entrega oficial, en la que también reconoció que esta acción beneficiará a más de 6 mil vecinos de 14 sectores.
Una intervención esperada por mucho tiempo
El presidente del COCODE, Marvin Felipe, expresó que esta es una conquista histórica para la comunidad: «Nunca habíamos contado con drenajes, a pesar del tamaño de nuestra aldea. Hoy se hace realidad lo que por décadas gestionamos sin respuesta.»
Las familias, en un esfuerzo colectivo, se encargarán de instalar la tubería y conectar las viviendas, evitando así que las aguas servidas circulen a cielo abierto, lo que representará una mejora significativa en salud pública y protección ambiental.
Infraestructura para la dignidad
Esta acción forma parte del compromiso del Gobierno del Presidente Bernardo Arévalo, que prioriza la inversión en agua y saneamiento como un derecho fundamental y como base para el desarrollo humano.
El Ministro de Desarrollo Social, Abelardo Pinto, reiteró el compromiso institucional con las comunidades más excluidas del país: “En el Mides trabajamos cada día por llevar soluciones reales a los territorios más olvidados. Esta entrega en Maraxcó es una muestra clara que cuando el Gobierno del presidente Arévalo escucha y actúa, se garantiza el derecho a vivir con dignidad. Las comunidades en condiciones vulnerables son, y seguirán siendo, nuestra prioridad.”